Juntos, Silas Nash y Charlize Wynwood deberán empezar a investigar el pasado si quieren descubrir quienes son y quienes quieren ser. Con el reloj marcando la cuenta atrás, la pareja se encuentra en una carrera por encontrar las respuestas que necesitan antes de que lo pierdan todo. ¿Pueden recuperar lo que una vez tuvieron? ¿Serán capaces de reconstruir lo que una vez fueron?
Partes anteriores de la trilogía:
Never Never es la historia de Silas Nash y Charlize Wynwood que un miércoles a las 11 de la mañana pierden todos sus recuerdos. Sin entender lo que está pasando o saber en quien pueden confiar, ambos inician una carrera desesperada por averiguar quienes son realmente antes de que el resto del mundo se de cuenta de lo que ha pasado. Será en esta última entrega cuando por fin tengamos las respuestas que buscábamos durante las dos primeras partes. Sin embargo, dado lo pobre y poco elaborado del misterio casi hubiera preferido quedarme con la duda.
Como ya os comentaba en mi reseña de las dos primeras partes, el misterio sobre porqué pierden la memoria nuestros dos protagonistas era lo que menos me interesaba de la novela. No es que no tuviera curiosidad, sino que, en mi experiencia, este tipo de misterios siempre acaban resolviéndose de la peor forma posible. Con Never Never, mi corazonada era muy acertada porque en esta última entrega las autoras deciden olvidar todas las pistas que nos habían ido dejando, así como todos los posibles caminos que empezábamos a entrever en la segunda entrega para darnos una explicación simplista y poco creíble. Es una pena porque sobre todo con los detalles que descubrimos en la segunda novela, podrían haber creado una explicación mucho más interesante.
Lo peor no es que la resolución del misterio sea pobre, porque eso ya me lo esperaba. Lo peor es que todos los otros frentes que teníamos abiertos con los secretos que tanto Silas como Charlie habían descubierto sobre sus vidas son olvidados o resueltos en un par de líneas para quitárselos de en medio. Las autoras tenían aquí material para escribir una verdadera telenovela adolescente al más puro estilo Revenge, pero lo tiran todo por la borda, convirtiendo a un personaje en el malo malísimo (prácticamente lo describen como un psicópata) para que reciba todas las culpas. Todo esto a pesar de que hasta ese momento había sido un personaje totalmente normal y muy secundario. El hecho de que le cargaran el muerto a este personaje no me disgustó tanto porque era una forma bastante simple de resolverlo todo, sino porque el personaje es un genio malvado sin justificación o prácticamente motivación.
Básicamente la explicación del genio malvado
Pero quitando el final, el resto de la novela es muy similar a las entregas anteriores. Tenemos un estilo simple pero con personalidad que yo disfruté mucho leyendo. Se trata de una narración directa, con alguna reflexión interesante y alguna que otra metáfora que le da sal al asunto. Un estilo ideal para cuando buscas una lectura ligera pero no totalmente vacía de contenido. El otro punto fuerte que ya veíamos en las anteriores entregas es la relación entre Silas y Charlie. Personalmente, su relación no llega a los niveles de la primera entrega, en la que me enamoraron, pero saben mantener bastante bien la química a pesar de todos los cambios por los que pasan los personajes. Como siempre, Silas lleva la voz cantante y sus capítulos son los que más disfruté. Tal vez mi desencanto con la pareja tenga que ver con el hecho de que el papel de Charlie se vuelve cada vez más secundaria a medida que avanza la trama. En la segunda parte se convierte en una damisela en apuros y en la tercera, parte de su garra y carácter también se pierden.
Por último quería mencionar lo corta que es esta última entrega. Si tras leer la primera parte os decía que esta historia podría haber sido un único libro, ahora estoy convencida porque las 3 partes juntas no suman más de 400 páginas, un libro de longitud normal. Esto hace que mi enfado con el final acelerado sea todavía mayor porque, si vas a hacer a la gente comprar tres libros que por lo menos valga la pena. No es este caso, donde tras leer las tres entregas te quedas con la sensación de que te han estafado haciéndote pagar tres veces por algo que podía ser un único producto. Lo más gracioso es que yo creo que sí hubieran tenido para desarrollar la historia durante al menos otras 200 páginas más si hubieran decidido darnos una explicación coherente a todo lo que estaba pasando. Sin embargo, las autoras parece haberse cansado de la historia y haber optado por un final demasiado dulce y demasiado simple que no pega con el resto de la historia. Una pena.
En resumen, Never Never Part III es un cierre pobre y poco trabajado para una historia que empezó con muchas posibilidades. La relación y química entre los protagonistas sigue siendo el punto fuerte de la novela y lo único que salva a esta última parte de ser un desastre épico.
Cita favorita
¿Conocíais la trilogía?
¿Habéis empezado a leerla?
1 comentarios:
Ains, qué penita me da leer ésto. He estado a punto de cerrar la ventana sin leer la reseña porque aún no he leído esta última parte y no quería spoilers, pero al ver el aviso en rojo me he quedado (gracias). No es la primera reseña que veo diciendo que la razón de la pérdida de memoria de los protagonistas es decepcionando, y me da pena, porque me habían gustado bastante la primera y segunda parte del libro. Ya no sé si leerlo para salir de dudas o quedarme con el buen sabor de boca de las primeras entregas y pasar de ésta. Sniffff en fin. Besotessss
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