Reseña: Rafaela de Mariana Furiasse

Como ya os comentaba la semana pasada en la reseña de Querido Nadie, Alcana es una perdición. Tiene un montón de libros a 0,90 céntimos que ya había leído (y adorado) hace años pero que no tenía. Obviamente no he podido evitar comprarme un montón de ellos. ¿El resultado? He tapado algunos agujeros que llevaban años queriendo rellenar en mi estantería y estoy releyendo un montón de libros que me encantaron en mi adolescencia. Uno de ellos es Rafaela y esta es su reseña.

 

 

Rafaela tiene dieciséis años y se siente invisible, aunque ella cree que sus caderas son demasiado grandes y que tiene una apariencia enorme. Tras una caída va a conocer a Simón, un chico de la clase de al lado con el que entablará una relación entre la amistad y el amor.

 

 

 

Rafaela, la novela

 

Rafaela es una novela simple y no digo esto como una crítica. La historia se centra en los acontecimientos de la vida de diaria de Rafaela una chica de unos 16 años que no se siente a gusto con su cuerpo, tiene problemas para entenderse con su madre y se siente como un bicho raro. Como os podéis imaginar, este marco no da para muchas sorpresas o florituras, pero aun así la novela resulta muy interesante.

 

El libro esta formado por pequeños capítulos, no más de un par de páginas cada uno, que son una especie de diario que Rafaela mantiene y que le sirve, no sólo para contar lo que le pasa si no también para desahogarse. Las entradas de diario se intercalan de vez en cuando con lo emails que Rafaela y Simón intercambian a lo largo de la historia.

 

La historia es previsible, como la mayor parte de las novelas que se centran en una relación amorosa, pero no se hace pesada en ningún momento. Marianna Furiasse consigue captar muy bien las inseguridades de la adolescencia, especialmente las relacionadas con el tema de la apariencia física y los primeros amores sin tener que llegar a puntos excesivamente dramáticos. Eso, acompañado de un lenguaje muy de adolescente permite identificarse muy rápidamente con la protagonista.

 

Precisamente a Rafaela es a quien llegamos a conocer un poco más. El resto de los personajes están bien esbozados pero apenas los disfrutamos porque en 124 páginas no da tiempo para mucho. Posiblemente ese sea uno de los puntos negativos de la novela, que es tan corta que se acaba cuando comienza a ponerse interesante. Tanto es así que el final es excesivamente abrupto. Para ser sincera, en las dos ocasiones que leí este libro pensé de verdad que le faltaban páginas. El final no parece un final si no que la autora se canso de escribir y dejó la obra inacabada.

 

Así me quede yo las dos veces que leí el libro

 

Mi principal problema con el final no es sólo que carezca de cualquier lógica terminar el libro en ese punto (imaginaos que J. K. Rowling hubiera acabado Harry Potter y la piedra filosofal cuando Harry se encuentra con Voldemort) sino que con el giro inesperado parece que se pierde todo el mensaje positivo sobre sentirse a gusto con uno mismo que da el resto el libro. Creo que mi enfado con el final es tan grande porque, aunque son muy pocas páginas, de verdad puedes empatizar con la protagonista y sus problemas y abandonarla en esa situación parece casi como una traición.

 

En resumen, Rafaela es un libro bastante bien escrito, con una historia simple pero interesante y unos personajes con los que te identificas muy fácilmente pero todo esto se ve estropeado por el final absurdo que tiene. Una pena que dos capítulos tengan la capacidad de estropear todo un libro.

 

Cita favorita:

 

Los kilos me pesan pero no tanto como me pesan las miradas.

 

 

Puntuación:2’5/5

 

¿Habéis leído la novela?

¿Conocéis algún otro libro bueno pero de final abrupto?