Top Ten Tuesday es una idea de Broke and Bookish. En esta sección cada martes, los blogueros hacemos una lista con libros relacionados con el tema de la semana. |
El tema de esta semana podría darme para hablar largo y tendido ya que con las historias de amor soy bastante exquisita, pero voy a limitarme a cinco cosas para no hacer este post interminable.
1. Nada importa porque él es mi verdadero amor
Una de las actitudes que más odio en las novelas románticas es esta idea estúpida de que cuando algo se hace por amor siempre está justificado. Esto se suele mezclar a menudo con las infidelidades, cuando los protagonistas acaban cediendo a sus deseos aunque alguno de ellos, o los dos, estén comprometidos. Pero no importa ¡porqué se quieren de verdad! Y una porra, los cuernos siempre son cuernos. Si ya no quieres a tu pareja déjala, no la utilices hasta que encuentres algo mejor.
2. He encontrado un novio y perdido un cerebro
Esto es precisamente porque temo cuando dos de mis personajes favoritos se vuelven pareja. Tengo que reconocer que este síndrome es más habitual en las series que en los libros pero siempre hay ejemplos en ambas artes. Para mí, lo peor es ver desperdiciarse a un personaje que podría ser muy interesante simplemente porque comienza una relación y los autores/guionistas no saben como mantener la personalidad de los dos personajes ahora que están juntos. Este problema es especialmente común cuando los personajes son bastante distintos entre sí. Para mí, esto ocurrió con Barney y Robin en Cómo conocí a vuestra madre y con Cuatro en Insurgente. Todavía lloro sus pérdidas.
3. No tengo vida, sólo te tengo a ti
Otro suceso habitual es aquellas historias donde el protagonista, ya sea hombre o mujer, vive exclusivamente para la otra persona y parece que no tiene vida más allá de esa relación. No estudia, no trabaja, no tiene amigos, ni familia ni hobbies y si los tiene apenas se mencionan. Este tipo de relaciones tan absorbentes me aburren muchísimo. Una persona tiene mucho más que contar además de con quien está saliendo.
4. Si está celoso es porque me quiere
Odio las relaciones controladoras, me parecen tóxicas y algo que habría que dejar de representar tan alegremente porque nos están haciendo mucho daño a todos. Así que cuando en una historia, estoy pensando en 50 sombras de Grey o After, intentan venderme que las obsesiones de los protagonistas masculinos por controlar todo lo que hacen las protagonistas femeninas es una forma de demostrar amor me dan ganas de vomitar.
5. No era malo, sólo necesitaba amor
Esta es una trope que también me cansa. No quiero decir que un personaje no pueda evolucionar, pero ese típico proceso en el que el chico malo se convierte en un gatito porque recibe el amor de la chica me parece falso, tópico y repetitivo. Por no decir que en el proceso, se tiende a perdonarle a estos personajes un montón de cosas que a cualquier otro personaje le asegurarían la orden de alejamiento.
¿Cuáles son los comportamientos que no soportáis en las relaciones románticas de los libros?
5 comentarios:
JAJAJAJA Meencantó, coincidimos en todas, estoy harta de que se justifiquen las infidelidades NO NO NO, si sabes que tenéis que estar juntos dejas a tu pareja antes, que no te cuesta nada joder. Lo de Cuatro no fue culpa de Tris,era ya así de antes xDDD Las relaciones en las que no hay espacio para nada más son enfermizas, de verdad, yo las odio.
Un beso! ^^
ajajajaj si, la verdad concuerdo con todas las cosas que mencionas, en especial la primera (odio las infelidades) y la de los celos. Es tan frustrante ver como intentan vender que ese sentimeinto que va más por obseción que por amor es lo que todo hombre tiene que tener. NO LO ES.
Una cosa que me molesta mucho son los traingulos amorosos. A veces estan bien, porque tenemos unos personajes preciosos y ni yo podría elegir a uno, pero ¿que la protagonista se la pase jugando con uno o el otro, en plan: oh, no se que hacer? LO ODIO. Si no sabes quien, no les des esperanzas. u.u
besos !
Coincido con todo :-)
Jajaja muy simpático. Yo odio los instalove y me gustan los triángulos. Un besote :)
Jaja, seguramente tengas razón con lo de Cuatro. Él ya era un soso de antes y yo no me había dado cuenta :P
Publicar un comentario